Regresamos a la cocina. Esta semana vamos a preparar una deliciosa salsa para carnes que nos llevan hace tiempo pidiendo en el blog. Se trata de la salsa pesto, una salsa italiana tradicional de color verde que tiene su origen en la región de Ligura (Génova) y que se prepara con hojas de albahaca fresca molidas junto a dientes de ajo, piñones, queso parmesano y aceite de oliva.
Dato importante antes de iniciar: La salsa al pesto no se cocina, se prepara en crudo, lo que la hace un alimento especialmente fresco y natural, que a su vez hay que conservar bien para que no pierda sus exquisitas propiedades culinarias, por lo que la frescura es clave en el desarrollo de esta receta. Repasemos los ingredientes:
- 2 ½ tazas de hojas de albahaca fresca
- 6 dientes de ajo
- 1 taza de piñones tostados (en Costa Rica se venden en Automercado)
- ½ taza de queso parmesano
- 1 ½ tazas de aceite de oliva extra virgen
- Sal y pimienta al gusto
Preparando la salsa pesto
Nuevamente, tener en cuenta el dato clave: frescura. Trata de hacerla una hora antes (máximo) de disfrutar el aperitivo.
- Limpia bien las hojas de albahaca. Ponlas en una licuadora o un procesador de alimentos a velocidad media/baja junto con los dientes de ajo, los piñones (almendras/nueces) y una pizca de sal. Comienza a moler hasta que se haga una pasta.
- Seguidamente incorpora poco a poco el aceite de oliva hasta que obtengas una mezcla uniforme. Lo ideal es que no quede muy líquido pero tampoco un taco sólido de masa verde indeterminada.
- Agrega el queso parmesano y revuelve. Prueba la sal, si necesita, ponle un toque. De igual modo, si consideras necesario que quede un poco más líquida, puedes agregarle un poquito más de aceite.
- Pon la salsa en un envase de vidrio. Tapa bien y reserva.
Y ahora a disfrutar. Recuerda pasar por la sección de cocina y de paso ver 'Ocho platillos para aprovechar la salsa pesto'.
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