El Caballero de la Noche: obra maestra con todas sus letras

The Dark Knight es una verdadera obra maestra. La nueva obra de Christopher Nolan pasará a la historia al adentrarnos en una trama sublime, intrigante y carga de fuertes emociones que nunca insulta al espectador, sino que al contrario le sumerge en un thriller policíaco que toma lo mejor del género noir -ese mítico ambiente de anti-héroes cargados de tragedias en los que hay pocos finales felices-, para regalarnos una jodida y hermosa obra maestra que cambiará para siempre la forma de retratar a los cómics en la gran pantalla. 

Por que sí, damas y caballeros, después de dos años y par de meses, Christopher Nolan y David Goyer lo han hecho de de nuevo. Con una historia soberbia sacan de nuestra mente el amargo sabor que nos dejaron las versiones caricaturescas de Joel Shumacher -que hundieron al personaje en un vacío del que parecía imposible recuperarse-, y se lucen en el desarrollo de uno de los héroes más grandes de la historia del cómic, evolucionando a cada a uno de los personajes que le rodeaban (y al mismo Batman) de forma sistemática y natural, revelando su lado más oscuro, sus temores internos, dudas y contradicciones, cerrando con broche de oro con la aparición (esta vez sí) del villanos de villanos: El Guasón.

Heath Ledger sin duda merece el oscar póstumo. Jack Nicholson (a quien respeto en todo el sentido de la palabra) no tiene nada que envidiarle a la imponente actuación que nos regala el actor australiano. Ledger le superó en todos los aspectos. Su voz, su risa, sus diálogos, sus pequeños tics, su forma de meterse en la historia. No hay palabras. Es un todo. Su personaje es increíblemente aterrorizador, psicótico y alucinante. Una representación fiel del sentido máximo de la esencia del personaje. Si Christian Bale logró darnos el gusto de ver el Batman que siempre soñaron los apasionados de cómics, Ledger nos ha regalado el mejor Guasón de toda la historia. Sí. Así como lo oyen. El Guasón de Ledger pasará a la historia como un villano sin reglas, psicópata, suicida, que camina en el hilo delgado entre la genialidad y la locura de sus planes. Su actuación y personaje quedara sin duda grabados para siempre en la memoria de los fans de la saga. Como dijo Peter Travells de la revista Rolling Stones “¿Oscar póstumo para Ledger? ¿Donde firmo?…”

La película, se le mire por donde se le mire es perfecta. Nada importan las casi 2 horas y media de duración. Sentado en el cine no quieres que termine. El elenco de lujo le saca el jugo a cada minuto de filmación: Morgan Freeman retorna con su ingenioso Lucius Fox que brilla en cada una de sus líneas, Gary Oldman sigue demostrando su talento a través del mítico comisionado Gordon, Michael Cayne hace gala de su sabiduría, inteligencia y humor negro en el papel de Alfred Pennyworth, Maggie Gyllenhaal y su Rachel Dawes, superan por mucho a la versión de Holmes y Aaron Eckhart se lleva la palmas desarrollando de forma majestuosa uno de los personajes más carismáticos de la saga (Dos Caras) y hasta William Fitcher en su corta aparición durante los primeros minutos de la película, redondea por todos lados la película, sin dejar de lado la espectacular banda sonora dirigida por el mítico maestro de los soundtracks, Hanz Zimmer, que sumerge al espectador en el oscuro mundo de Ciudad Gótica y nos regala uno de los mejores finales que haya visto en la historia del cine. Simplemente soberbio. 

El Caballero de la noche sin duda es la mejor película de Batman que se haya filmado, al regalarnos un final que resume todo lo que Batman es, significa y representa. "A silent guardian. A watchful protector. A Dark Knight" El caballero de la noche ha regresado. No hay palabras… tan sólo aplausos...