Rendirse es fácil. Demasiado para ser sinceros. Cuando las pruebas y las dificultades vienen, dar un paso atrás siempre será la ruta más rápida y accesible en esta vida.¿Con o sin dolor? ¿Tirar la espada o seguir peleando? Son decisiones que siempre marcarán las cosas y la forma de ver el mundo que nos rodea, para siempre. Cuando los balas de la duda y la incertidumbre golpean las paredes de nuestra seguridad interna, la respuesta más sensata es sacar la bandera blanca y dar por terminada la batalla.
Uno no puede negar que dejar de luchar es una buena opción ante las circunstancias. Alejarse de los riesgos, y esconderse de los problemas son caminos seguros que garantizaran nuestra permanencia y acrecentaran nuestros años de vida. ¿Sin embargo que tipo de vida es aquella que no tienen aventura, misterio e intriga? ¿Que clase de vida lleva un ser humano que entriega sus ideales a las circunstancias y el temor?
¿Cual es el sentido de retirarse de la batalla, si al final de nuestros días, nos invadira el inevitable deseo de cambiar todos los días de nuestros vidas por una oportunidad, tan solo una oportunidad para regresar en el tiempo y hacer lo que siempre supimos que era correcto?¿Para que construir un mundo seguro a nuestro alrededor... y acabar nuestros días en un asilo, balbuceando acerca de alguna desgracia olvida? Siempre lo he dicho: Primero muerto que de rodillas. Prefiero morir en la plenitud de mi juventud luchando, adentrandome en la incertidumbre y lo desconocido, que viejo y olvidado lamentando aquello que alguna vez pude hacer, tener o conocer en esta vida.
Como dice G.K. Chesterton "El que pierde su vida a causa de mi, la hallará no es una pieza mistica para santos y heroes. Es una pieza de consejo diario para marinos y montañistas" Se puede imprimir en una guía alpina o en un manual de instrucciones. Un hombre quien el mar le corta el paso podría salvar su vida si se arriesga en el acantilado. Si un soldado rodeado de enemigos ha de sacrificar su escape, debe combinar un fuerte deseo de vivir con una despreocupación por la muerte. Ese es el verdadero valor. Anhelar la vida como el agua, y estar dispuesto a tomar la muerte como el vino.
Correr riesgos. Luchar por nuestros ideales. Creer en nuestros sueños. Nuestra verdadera aventura comienza cuando nos olvidamos de formulas. Cuando no importa cuanta veces la vida nos tumbe, podamos ser capaces de ponernos en pie una vez más y seguir luchando. Hasta que suene la campana. Hasta el final. Sin importar lo que venga. Sin temores. Contra viento y contra marea. Post relacionados:
"El que pierde su vida a causa de mi, la hallará"
ResponderEliminaracaso eso no es Bíblico???? mmmm...
muy bueno querido... muy bueno... besitos Varguitas!!!!
Buenas, pasé a conocerte y de paso a felicitarte por tu lugar en el podio! Espero ansiosa tu post, yo ya me puse a escribir!! Te mando un beso grande y un gusto descubrirte!!
ResponderEliminarMe sono a una canción de Franco de Vita pero esa es más amorosa.
ResponderEliminarY dices que no se acepta spam y se me abre una cuando comento...
Que pereza comentar asÍ :(
Dont give up Varguitas!!
ResponderEliminarGracias amigas por sus palabras. Seguimos echandole ganas a la vida, sin rendirnos, luchando hasta el final.
ResponderEliminarPalis: Tu lo has dicho Palis, es biblico, Jesús lo dijo, me llamo la atencion la manera en que lo comento G.K. Chesterton, uno de mis escritores favoritos en la lengua inglesia. Cuidate amiga ;)
Dragoncita: Claro amiga, hay que saber cuando tirar la toalla.. en mi caso, en mi vida.. hasta el final de la misma. Saludos ;)
Capitana: Gracias a señorita, me encanta leerte tambien, apenas lo tenga te aviso ;)
PD: Estoy trabajando en eliminar ese anuncio tan molesto, no se porque esta saliendo, pero igual gracias por pasar y comentar jeje
Alexa: Me honra tu presencia mi querida amiga, bueno verte de vez en cuando por aca. Seguiremos luchando.
Feliz semana mis queridas amigas. Gracias por su visitas y comentarios. Se les quiere!!