Desde mi ventana: Forastero, vivo o muerto...


Tarde o temprano voy a encontrarte. Y cuando lo haga, suplicarás para que ponga fin a tu dolor. Yo te miraré a los ojos, y suavemente responderé: No.


El sonido del ferrocarril retumba en nuestros oídos. Es la extraña forma que tiene el destino de anunciar que ha llegado el momento de abandonar la roca que nos sirve como almohada, recoger nuestras cosas y emprender nuevamente nuestro camino. El sol comienza a ocultarse perezosamente entre las montañas. Un poco de agua, recurso invaluable en estos lugares, sirve para calmar la sed implacable que carcome nuestra garganta. Sed de justicia y venganza. Día tras día, a lo largo de veinte años, esa sensación, nunca se ha apartado de nuestro lado.

Forastero. Un desconocido en tierra de nadie. Durante veinte años, hemos luchado contra todo. Sobrevivimos a la peste, el desierto y a la viruela. A los caprichos del tiempo. Crueles sequías e inviernos terribles. A lo largo de estos años, he visto hombres fuertes marchitarse y morir bajo el sol implacable. Enterré más niños de lo que alguna vez soñe tener. Hemos luchado. Contra todos. Hombre duros. Toscos y despiadados. Viví y morí junto a ellos. Eramos más que una banda de extraños. Eramos casi hermanos. Robando trenes. Asaltando bancos. Quemando poblados. Incluso matando aquellos que nunca nos agrandaron. Un grupo de mercenarios. Sin miedo a la muerte. John Williams era uno de ellos.

La primera vez que lo vi, pensé que no era más que un bastardo arrogante. Cuando lo conocí, supe que estaba en lo cierto. Como olvidarle. Sus hombres, aquellos que alguna vez fueron mis compañeros, incendiaron mi rancho y se llevaron todo lo que me mantenía vivo. Frente a mis ojos, asesinaron a mi mujer y mis hijos. Aún recuerdo su maldita sonrisa cuando nos dio por muertos en el desierto. Con una botella de combustible para calmar nuestra sed, y una bala para poner fin a nuestro sufrimiento. Como perros abandonados a nuestra suerte. John Williams me miró a los ojos y sonrió. Veinte años. Quien dijo que el tiempo curaba las heridas, jamás ha estado en la desgastada piel de un hombre que lo ha perdido todo. Caminado entre sombras y arena. Sufriendo en silencio. Intercambiando día con día nuestro dolor, por ira, venganza y rencor. Noche tras noche. Enfrentando nuestro pasado. Por veinte largos años. Hasta hoy.

El sonido de caballos a lo lejos, nos alerta que nuestro corazón no nos ha traicionado. El día que por tanto tiempo hemos esperado, finalmente se presenta ante nuestros ojos. Han sido años siguiendo su rastro. Esperando el momento indicado. Guardando esa bala y esa botella ron en nuestro bolsillo. John Williams. El hombre que nos quitó lo más preciado, se dispone a entrar al viejo burdel que cientos de viajeros visitan cada año. Como siempre, viaja armado hasta los dientes, y bien acompañado. Mis hermanos. Jesse, Bill, y Frank. Seis mercenarios sin escrúpulos. Carlos, Ennio, y Leonidas. Perros guardianes que cuidan cada uno de sus pasos, marchan fielmente a su lado. Malditos bastardos. A los muertos les importa poco la venganza, nos hemos repetido a lo largo de estos años, intentando apaciguar el fuego y el ardor que consumen nuestro alma. Sin embargo, no podemos engañarnos. Solo un bastardo sin sentimientos no querría vengar la muerte de aquellos a quienes alguna vez amo. Por eso caminamos. Sin miramientos. Hasta la puerta de ese viejo burdel.

Cubiertos de pies a cabeza con el mismo sombrero, la misma ropa, y el mismo semblante con el que fuimos abandonados hace ya veinte años. Nuestras manos se posan sobre la puerta que da a la entrada principal. Bromas y risas se escuchan desde afuera. Una luz tenue sobresale en el ambiente de la vieja taberna. Mujeres, santas y pecadoras, bailotean de un lado a otro, enseñando a esos bastardos sus encantos y secretos. Mis muchachos, pienso mientras los veo dejándose llevar por el encanto oculto que tiene la más vieja de las profesiones. Poco a poco, y muy lentamente avanzo hasta el final del pasillo que esta junto a la taberna principal. Y la veo. Reluciente. Hermosa como siempre. Andrea. La chica que intentó liberarnos de esta prisión. Su voz suave y dulce pronunciando nuestro nombre, es como contemplar un noche llena de estrellas en el firmamento, lo único capaz de traer paz a nuestro afligido cuerpo.

Si no regreso. Quiero que continúes con tu vida. Su mirada se clava en la mía. Cuanta pasión atrapada entre sus venas. Vaya, de verdad que sabes como hablarle a una chica. Su sonrisa tiene el mismo sabor irónico que lleva cada una sus palabras. Desearía poder liberarte de este infierno, pero la llave que puede sacarte de tu cautiverio, esta ahí adentro. Hay dolor e impotencia en sus ojos. Nunca dudes de esto. Todo lo que hay en mí. Todo lo que siento, todo lo que soy. Es tuyo. Por siempre. Una lágrima corre por su mejilla. Ve. Nos dice suavemente. Ha llegado tu hora. Toma lo que es tuyo, y haz que valga la pena...


Nuestro paso es lento por el oscuro pasadizo que da hasta la habitación treinta y cuatro. Las voces de los clientes y sus mujeres se pueden escuchar a través de las paredes. A nadie parece importarle. Caminamos hasta el final del pasillo. Mi arma esta preparada. Treinta centimetros de madera son los que nos separan de nuestra venganza. Y así avanzamos. Hasta la habitación señalada. Los recuerdos florecen. El tiempo se detiene. Un segundo. Un respiro. Y la puerta cae.

La chica corre a quitarse de nuestro camino, mientras el maldito bastardo permanece desnudo sobre la cama. No se incomoda ni un solo instante. ¿Me recuerdas John? Sabe que venimos por él. Te lo dije una vez. Tarde o temprano iba encontrarte. La joven nos observa aterrorizada. Chica, ¿cual es tu nombre? Nuestro enemigo traga en seco. Jessica. Puedo escuchar el paso de sus gorilas subiendo por las escaleras. Jessica, sugiero que tomes tus cosas y te vayas lo más pronto que puedas. John observa la botella que llevo en mi mano. Este hombre y yo tenemos negocios pendientes. La chica toma una de las sabanas para cubrir la desnudez de su cuerpo, y cruza a nuestro lado temerosamente. Gracias. Le escucho susurrar antes de irse. Nuestra arma permanece en lo alto. Hay terror en sus ojos. Por favor -dice temblando el hombre que hemos perseguido por veinte años-, hazlo rápido...

Nota del autor. Este post es un "intento" de homenaje a dos grandes del género. Don Sergio Leone y Don Ennio Morricone. Y digo intento, porque no hay escrito que pueda homenajear el trabajo de los creadores de como bien dijo Quentin Tarantino, fue "la película mejor dirigida de todos los tiempos", el clásico del viejo oeste "El Bueno, el Malo, y el Feo" y que a lo largo de los años sigue inspirando el trabajo de cientos escritores, directores, y autores como nosotros. Para ellos, nuestro aplauso y homenaje. A nuestros amigos que nos siguen día con día, mil gracias por sus opiniones, pero sobre todo, mil gracias por permanecer a nuestro lado. Un enorme abrazo, feliz fin de semana!

17 comentarios:

  1. Hay fraces que uno puede aplicar muy rapido,me recordaste algo dije hace tiempo de una buenas historias brasileñas que no tinen fin
    Gracias por volver unos ayeres .ojala el cumplimento del destino fuera asi...

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  2. Me gustan estas historias, donde hacen que tu mente vuele y se imagine tiempos en los que nunca viviste, pero que si existieron. Gracias

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  3. Aaaaaah el bueno, el malo y el feo, me lamento no haberla visto completa aun, me dejo picado puesto que solo he visto la mitad, la música es perfecta de esta pelicula y la historia!!!

    Ya extrañaba pasar por aqui, como siempre un gustazo y me voy con muy buen sabor de boca, muchos saludos!

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  4. Bien llevado! bien armado! excepcional manejo! buen texto, se va rapido (eso lo siento) y queda abierto, muy bien en su estilo, mae impecable, excelente "intento"

    deshora.

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  5. ¿Entonces acá es donde habita un caballero legendario? eso dicen viejas lenguas.. jajaja.

    Como está señor Pablo Vargas?, por acá empezaré a rondar, para poder intercambiar uno que otro pensamiento.

    Nos estaremos viendo.

    Saludos
    hannibal

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  6. Desde que empecé a leerlo, me vino a la mente Clint Eastwood jejeje

    Me encantó.

    Saluditos

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  7. Hola Pablo!
    Te dejé un meme en mi blog:
    http://musicoinyectado.ticoblogger.com/2010/06/meme-mis-5-deseos-antes-de-morir.html

    Saludos!

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  8. LA vi pero ya hace mucho tiempo, quizás deba volver a verla, por que es un clásico.

    Saludos Pablo!

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  9. Pablo:

    Es un deleite leer entradas tan fluidas, bien estructuradas e interesantes...Bravo!

    Me sentí con algunos Bangs! rondándome la mente... ¿quienes serían en mi universo el malo, el bueno y el feo? Bang! tiro directo a la conciencia y el recuerdo.

    Un afectuoso saludo y un beso.

    PD Gracias por pasearte por mis suspiros y plasmar tu eco.

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  10. hola! me gustaron mucho los textos, wow... y este en especial que buenas imagenes tiene. definitivamente me quedo por mas. un abrazo, te sigo.

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  11. Se ve espuela al escribir jaja. Man muy bien hecho, se va rapidísimo, entretiene... y eso es mucho pedir para una conversación del personaje con él mismo.
    Me gustó bastante y excelente rendir homenaje a quien se lo merece.

    Muy bueno

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  12. Que intenso, me gsto. Te cuento que nunca te habia leido un relato completo. :) Siempre un placer leerte Pablito. Un abrazote.

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  13. Viejo, si Clint Eastwood lee esto te lo compra men - excelente texto, una novela. Lo senti, me gusto lo seco, lo despiado, lo crudo de esa realidad.

    Esa vida de hombres duros tallados por el sol y la arena.

    Si mi abuelo hubiese leido esto te hubiera dicho que él lo hizo todo jejeje

    Buenisimo fren, un abrazo

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  14. hola sabes que onda
    hubiera apostado contigo por va ganar alemania tu querida argentina valio

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  15. Hola amigos!!

    Primero que nada, gracias por sus comentarios, esta es la primera vez que intentamos publicar un mini-relato en el blog, y no sabía que esperar, pero me alegra mucho que les haya gustado. Un fuerte abrazo y gracias por su apoyo!!

    Moriana: Buenas señorita! Creo que el destino tarde o temprano nos da la oportunidad que estamos esperando, y eso es algo que intentamos reflejar en el texto. Fuerte abrazo!!

    Andres: Man pura vida, hicimos nuestro mejor esfuerzo, Leone y Morricone eran un par de grandes. Saludos!!

    Pato: Man no sabes lo que estas perdiendo, es un clásico, la escena del trio en el desierto, es de antología. Te la recomiendo. Saludos!!

    Amorexia: Man esos cumplidos, viniendo de una de las personas que más admiro, es un gran aliciente. Pura vida, un fuerte abrazo!

    Hannibal: Así es compañero, esta es nuestra caberna y nuestra guarida. Bienvenido, será un placer tenerte por acá. Saludos!

    Heidy: Gracias amiga, esa era la idea. Un abrazo!!

    Edwin: Listo pa, ya cumplimos, y ya te devolvimos el regalo, nominandote a otro. Saludos!!

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  16. Ely: Siempre es bueno estar recordando esos viejos filmes que nos inspiraron a soñar... saludos amiga!

    Etarinyeth: Gracias amiga! No pensamos causar ese fabuloso efecto, pero te soy sincero que me alegra y me has sacado una sonrisa, que bueno que te gustara. Un abrazo!

    Sabina: Bienvenida señorita, que bueno que te gustaron de primera entrada, esperamos verte más seguido por acá, siéntete como en casa, un abrazo!!

    Jos: Pura vida man! A como salio, así lo escribimos, y sinceramente, tuve taquillo de publicarlo porque se veía muy largo, pero que bueno que se paso rápido. Un abrazo!

    Joha: Gracias amiga! Nunca habíamos publicado un completo, y estamos contentos que el primero, les haya gustado, a trabajar en el segundo pues... un abrazo!!

    Andrés: Ah man, que pedazo de cumplido. Ahora si me hizo llorar. Así es la vida de los hombres tallados por el sol y la arena. Saludos, un abrazo!

    Moriana: Ves, el que rie de ultimo rie mejor, tenemos a España en la gran final, igual hubieses perdido...

    Gracias nuevamente por estar a nuestro lado, un enorme abrazo!!

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  17. It took me a long time to search on the net, only your site open up the fully details, bookmarked and thanks again.

    - Kris

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Sobre el autor

Mi foto
Escritor costarricense. Director de la Revista Level Up. Autor de la novela "El Hombre de la Rosa Negra" (ULACIT, 2009), y el microrrelato "Un café para celebrar" (Editorial Costa Rica, 2012). Actualmente se encuentra trabajando en su novela "Nueve minutos para la media noche" (2013).

Obras publicadas...



El Hombre de la Rosa Negra. (ULACIT) (2010) -Descargar-
Premio Joven Creación (Editorial de Costa Rica) (2012) - Descargar-

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